Durante la gira para conmemorar sus 30 años sobre los escenarios, Loquillo ha conocido la sentencia por el altercado producido el pasado 27 de agosto.
El cantante ha sido condenado a tres meses de prisión y una multa de 3.500 euros por protagonizar una riña callejera en San Sebastián en la que propinó un puñetazo a un individuo.
En la madrugada de aquel día, Loquillo aprovechó para dar un paseo por la ciudad y acudiendo a un pub situado en los aledaños de la Parte Vieja. A la salida del local, coincide con el agredido y entablan una conversación. En algún momento, Loquillo le propia un puñetazo a su interlocutor, haciéndole caer al suelo.
Como consecuencia de ello, la víctima acudió al hospital, donde la lesión precisó ser suturada, y se le diagnosticó, además, una artritis postraumática en la muñeca derecha. El agredido tardó 54 días en recuperarse, doce de los cuales estuvo impedido para sus ocupaciones habituales.
Durante el juicio, Loquillo se mostró conforme con la pena que habían solicitado la Fiscalía y la acusación particular.